Casa Matriz
“Don Benito nace a través de una conversación con amistades que recuerdo con mucho cariño, quienes me plantearon la idea de fabricar empanadas en una forma muy tradicional, buscando los sabores propios de una comida de campo.”
A mediados de 1992, y haciendo uso de la cocina de mi hogar, un canasto y una bandera blanca, símbolo de un lugar donde se venden empanadas, comencé con aquel sueño. Mientras pasaban los días, surgían inquietudes acerca de elaborar una receta propia que fuese identidad de mis empanadas, la que conseguí en un corto plazo y que ocasionó muy buenos comentarios entre los comensales; provocando que día a día más clientes se sumaran, reiterando la visita a nuestro local muy seguido; y contando sólo con un horno a leña de muy baja capacidad.
Viendo la aceptación de nuestro público empezamos a elaborar platos típicos chilenos: cazuelas, carne mechada y plateada, costillar al horno, humitas y pastel de choclo.
Hoy, a más de 20 años de este hermoso comienzo, recuerdo esos días con orgullo y humildad, agradeciendo en lo más profundo de mi alma la preferencia que ustedes le han dado a nuestro trabajo, haciendo a diario más hermoso el sueño y también más alegre el despertar.
Nuestro principal objetivo es expresar el cariño hacia las tradiciones de nuestro país, demostrando que nuestra gastronomía es tan rica y variada como la internacional, resaltando las tradiciones culinarias y étnicas de Chile.
Los esperamos en un ambiente campestre, con música chilena y la simpatía que es propia del hombre de campo.